miércoles, 7 de octubre de 2009

Apéndice I-J

Isonade: Es un yōkai con forma de enorme tiburón, tipo monstruo-marino, que se dijo que fue a vivir frente a la costa de Matsuura y otros lugares en el oeste de Japón.

Apéndice I-J

Inugami :Son unas criaturas de la mitología japonesa con apariencia de perro que actúan como guardianes de su amo.

Antiguamente se decía que para crear uno de estos inugami había que enterrar un perro hasta el cuello y había que ponerle comida, pero sin que pudiera alcanzarla. Durante el proceso, el amo le dice al perro que su sufrimiento no es más grande que el suyo. Cuando el perro muere, se transforma en inugami y se deja la comida como ofrenda, cosa que hace obediente al espíritu.

Apéndice I-J

Ikiryō: Es una manifestación del alma de una persona viva separada de su cuerpo.

Apéndice I-J

Iapis: (Ἰάπυξ) Varios personajes con el mismo nombre:

Un hijo de Licaón, el rey que fue convertido en lobo por hacer sacrificios humanos a Zeus. Como el resto de sus hermanos destacaba por su impiedad, hasta tal punto que el mismo Zeus se dirigió a su palacio, disfrazado de mendigo, para comprobar si eran ciertos los rumores sobre sus atrocidades. Sospechando que les visitaba una divinidad, los hijos de Licaón decidieron asesinar a uno de sus hermanos (Níctimo) y servírselo de cena, mezclado con entrañas de animales, para así comprobar si era o no un dios. Pero Zeus, dándose enseguida cuenta de lo abobinable del manjar, devolvió a la vida a Níctimo y fulminó con sus rayos a sus asesinos, o bien los convirtió en lobos. Junto con sus hermanos Daunio y Peucetio, logró huir al sur de Italia, acompañado de un ejército de ilirios al mando del general Mesapio. Allí vencieron al pueblo autóctono y se dividieron el país entre los tres hermanos. Iápix fundó entonces la colonia de Iapigia, a la que dio su nombre.

Un hermano del cretense Icadio al que también se le atribuye haber fundado la colonia de Iapigia.

Un hijo de Dédalo y de una mujer cretense. Los cretenses que emigraron al sur de Italia recibieron por él el nombre de iapigios, confundiéndose por tanto con los dos personajes anteriores.

Iápix o Iapis era un hijo de Iaso muy querido por el dios Apolo, que le otorgó el don de la profecía, el arte de saber tocar la lira y de la medicina. Esta última enseñanza fue la que más agradeció Iápix, obsesionado como estaba con prolongar la vida de su padre. También usó sus cualidades como médico para sanar a Eneas cuando éste fue herido en la guerra contra Latino.